El Director Financiero participa activamente en la generación de objetivos –la definición del futuro de la empresa, la programación del mejor guión – construcción de ese futuro y el control de los hechos, con el fin de proyectar a la empresa sobre la senda rentable financieramente saneada.
Debido a la alta intervención del financiero en las responsabilidades básicas de la dirección de la compañía, se le considera como el auténtico piloto de la actividad.
Las finanzas en la empresa y la dirección financiera como gestora de las mismas, constituyen la columna vertebral de toda actividad.